Educación, reproducción social y subjetividad. Una perspectiva a partir de Bourdieu, Freire y Mclaren

Abstract

At the moment we face social diverse crisis that seemed to remit to the loss of such values as the respect, the tolerance, the solidarity and the social justice; it in view of a value to which call "freedom", term that he/she has gone losing their original sense under a social order as the capitalist. We are free of surviving above the info:eu-repo/semantics/other ones; we are free of choosing governments that don't leave option; we are free of studying that that our class social it allows us and we are free of working in the place that the system us it grants; we are free of believing what we are inculcated from the moment in that we are born: religion, manners, habits, customs. We are free provided our freedom doesn't put in risk the social order that governs us, while not let us violate the parameters settled down by the social and political system; always and when we are "good citizens." However, it seems since to be that this is not enough we are under a régime that he/she has survived many years by means of the corruption, the margination, the injustice, the individualism and the competitiveness. All these bad habits of the call democracy they cannot be perceived so easily when we are accustomed to the paternalism, to the silence, to the conformism; but when us we stop a little to understand what passes to our surroundings they begin to arise doubts.

Actualmente nos enfrentamos a diversas crisis sociales que parecieran remitir a la pérdida de valores tales como el respeto, la tolerancia, la solidaridad y la justicia social; ello en vista de un valor al cual llamamos “libertad”, término que ha ido perdiendo su sentido original bajo un orden social como el capitalista. Somos libres de sobrevivir por encima de los demás; somos libres de elegir gobiernos que no dejan opción; somos libres de estudiar lo que nuestra clase social nos permite y somos libres de trabajar en el lugar que el sistema nos otorga; somos libres de creer lo que se nos inculca desde el momento en que nacemos: religión, modales, hábitos, costumbres. Somos libres siempre y cuando nuestra libertad no ponga en riesgo el orden social que nos rige, mientras no violemos los parámetros establecidos por el sistema social y político; siempre y cuando seamos “buenos ciudadanos”. Sin embargo, parece ser que esto no es suficiente ya que nos encontramos bajo un régimen que ha sobrevivido muchos años mediante la corrupción, la marginación, la injusticia, el individualismo y la competitividad. Todos estos vicios de la llamada democracia pueden no percibirse tan fácilmente cuando estamos acostumbrados al paternalismo, al silencio, al conformismo; pero cuando nos detenemos un poco para entender lo que pasa a nuestro alrededor comienzan a surgir dudas.