Comportamiento organizacional en la SEDESOL en Michoacán

Abstract

It is sometimes difficult to distinguish between motivation and job satisfaction due to their close correlation. The same happens between job satisfaction and morale with the employee. That is why this work is a simple way to explain the differences between satisfaction, motivation and behavior of the worker and help to understand the different sources of satisfaction required by employees and which one is the It is more relevant and provides greater good. There are factors that affect customer satisfaction and not part of the working atmosphere. For example, satisfaction depends on the age, health, age, emotional stability, social status, recreational and leisure activities, social affiliations, family relationships and other outbursts. The same applies to the motivation and personal aspirations as well as its implementation. Today companies seek above all measure and improve the attitudes of their members, but it was not always so. In the era of scientific management, when the employee is considered a machine of the team, management was not interested at all staff; after all, a machine lacks attitudes and feelings. At that time the industry was to increase production almost exclusively with the creation of more effective methods of selection. All this came to change radically with the advent of human relationships. This approach showed that human productivity depended not only on their skills and knowledge. As soon as the industry realized it, he began frantic efforts to measure attitudes and train supervisors to show sensitivity to the feelings of staff.

A veces resulta difícil distinguir entre la motivación y la satisfacción con el trabajo, debido a su estrecha correlación. Lo mismo sucede entre la satisfacción con el trabajo y la moral con el empleado. Es por ello que este trabajo trata de explicar de una manera sencilla las diferencias que existen entre la satisfacción, la motivación y el comportamiento del trabajador, así como ayudar a entender las diferentes fuentes de satisfacción que requieren los empleados y cuál de ellas es la que tiene mayor relevancia y brinda mayor bienestar. Hay factores que repercuten en la satisfacción y que no forman parte de la atmósfera laboral. Por ejemplo, la satisfacción depende de la edad, salud, antigüedad, estabilidad emocional, condición social, actividades recreativas y de tiempo libre, afiliaciones sociales, relaciones familiares y otros desahogos. Lo mismo sucede con la motivación y aspiraciones personales, así como con su realización. En la actualidad las empresas procuran ante todo medir y mejorar las actitudes de sus miembros, pero no siempre fue así. En la era de la administración científica, cuando al empleado se le consideraba una máquina más del equipo, a la gerencia no le interesaba en absoluto el personal; después de todo, una máquina carece de actitudes y sentimientos. En esa época la industria trataba de aumentar la producción casi exclusivamente con la creación de métodos de selección más eficaces. Todo esto vino a cambiar radicalmente con el advenimiento de las relaciones humanas. Este enfoque puso de manifiesto que la productividad humana no dependía tan solo de sus habilidades y conocimientos. Tan pronto como la industria se dio cuenta de ello, emprendió frenéticos esfuerzos para medir las actitudes y adiestrar a los supervisores para que mostraran sensibilidad ante los sentimientos del personal.