This paper analyzes the social policy programme Comedores Comunitarios by Cruzada Nacional contra el Hambre in the municipality of Morelia Michoacan from 2013 to 2014 in order to know its effect in reducing food poverty. The conceptualization of public policies, the phenomenon of poverty and the social development in Mexico, as well as the methods for measuring poverty. To that end, the model is adecuo of monitoring and evaluation of policies, programmes and social projects of the Centro de Implementación de Polìticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento en Argentina (CIPPEC) joined the United Nations Children's Fund (UNICEF), Logical Framework Approach (LFA) applied to the Rules of Operation of the Program (ROP) and the lifting of a questionnaire among benefit households that included Mexican Scale of Food Security (EMSA) Developed by the Consejo Nacional de Evaluación de la Polìtica de Desarrollo Social en México (CONEVAL). Among the results of the investigation, identified a positive change in the lives of the people who participate in the program. However, it warns that Secretaria de Desarrollo Social (SEDESOL) has experienced difficulties to achieve effective coverage of persons for which they were designed the Comedores Comunitarios only reaching the 5.24% of the target population. Additionally, it persists in the program the vision of poverty as a problem of individual capacities, detached from the field of economic development. This implies that the severe food insecurity remains a constant in households with beneficiaries, where only those people who focused support due to their age (children under 12 years and 65 years or older) or special situation (pregnancy and disability) is an exempt from problems of undernourishment
El presente trabajo analiza el programa de política social Comedores Comunitarios de la Cruzada Nacional contra el Hambre en el municipio de Morelia, Michoacán de 2013 a 2014 con la finalidad de conocer su efecto en la disminución de la pobreza alimentaria. La conceptualización de las políticas públicas, del fenómeno de la pobreza y el desarrollo social en México, así como de los métodos para medir la pobreza. Para tal fin, se adecuó el modelo de monitoreo y evaluación de políticas, programas y proyectos sociales del Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento en Argentina (CIPPEC) incorporado al Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la metodología de marco lógico (MML) aplicada a las reglas de operación del programa (ROP) y el levantamiento de un cuestionario entre hogares beneficiados que incluyó la Escala Mexicana de Seguridad Alimentaria (EMSA) desarrollada por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social en México (CONEVAL). Entre los resultados de la investigación, se identificó un cambio positivo en la vida de las personas que participan en el programa. Sin embargo, se advierte que la Secretaria de Desarrollo Social (SEDESOL) ha experimentado dificultades para lograr una cobertura efectiva de las personas para las que fueron diseñados los Comedores Comunitarios, llegando sólo al 5.24% de la Población Objetivo. Adicionalmente persiste en el programa la visión de la pobreza como un problema de capacidades individuales, desligado del ámbito de desarrollo económico. Esto implica que la inseguridad alimentaria severa permanece como una constante en los hogares con población beneficiada, donde únicamente aquellas personas en quienes se focalizó el apoyo debido a su edad (menores de 12 años y mayores de 65 años) o situación especial (embarazo y discapacidad) se encentran exentos de problemas de malnutrición por déficit.