From conspiracy to rebellion in New Spain (1804 1811). Centered on the ideas hatched in the minds of the Creole elites, composed of lawyers, priests and military sectors as among intellectuals of enlightened despotism and its opponents. Both groups will make up the various factions and parties that engaged in the first phase of independence. We focus the study thought of Hidalgo by his proclamations, decrees or letters to demonstrate that assumes a different position than that held at the beginning of the movement and gradually moves away from this program to fly the social revolution and vindicate the rights and freedoms of indigenous peoples, who want to build, rather than an alternative government, a society to end the power and dominion of the Spaniards and Creoles on the native peoples of New Spain and is similar to the ancient Christian communities. A society that inaugurated an era of communal brotherhood, similar to those of primitive communism: egalitarian, ascetic and quiliásticas, beyond modernity. Hence its destructive and violent nature. Hidalgo embraces political and ideological positions of commoners in the revolution and the thought of leaving the native intelligence to become the spokesman for the oppressed and marginalized of the modernization process forgetting the political program of the Creoles. This position generates the split between Hidalgo and Allende thereby causing failure and defeat.
De la conspiración a la rebelión en la Nueva España (1804- 1811). Centrado sobre las ideas encubadas en el pensamiento de las élites criollas, integrada por abogados, sacerdotes y militares como entre los sectores intelectuales del despotismo ilustrado y sus oponentes. Tanto unos como otros conformarán los distintos bandos y partidos que protagonizaron la primera fase de la independencia. Enfocamos el estudio al pensamiento de Hidalgo mediante sus proclamas, decretos o misivas para demostrar que asume una postura distinta a la que sostuvo al inicio del movimiento y paulatinamente se aleja de ésta para enarbolar el programa de la revolución social y reivindicar los derechos y libertades de los pueblos indígenas, los cuales quieren construir, más que un gobierno alternativo, una sociedad que acabe con el poder y dominio de los peninsulares y criollos sobre los pueblos originarios de la Nueva España y que sea similar a las antiguas comunidades cristianas. Una sociedad que inaugure una era de fraternidad comunitaria, muy similares a las del comunismo primitivo: igualitarias, ascéticas y quiliásticas, ajenas a la modernidad. De ahí su carácter destructivo y violento. Hidalgo abraza las posturas políticas-ideológicas de los plebeyos en la revolución y abandona el pensamiento de la inteligencia criolla para transformarse en el vocero de los oprimidos y marginados del proceso modernizador olvidándose del programa político de los criollos. Tal posicionamiento genera la ruptura entre Hidalgo y Allende provocando con ello el fracaso y la derrota.
