The Tacámbaro-Turicato region has abundant natural resources that made it coveted since times before the arrival of Europeans, who, upon discovering its riches, did not hesitate to colonize subordinating their ancient dwellers. The best know example of this is the large number of estates that prospered on it. In many cases, the holders of inclusions came into conflict over the lands with neighboring indigenous communities. The case of the San José Puruarán hacienda and its owners, the Peredo family, constitutes a representative case of this type of lawsuits both for the region and for Michoacán and is widely known by specialists. However, to date the information on its origins, consolidation and what this involved, as well as its relations with neighboring haciendas and the indigenous communities with which it coexisted is poor and scarcely documented, almost on the margin of historiography since it is largely limited to brief references. For this work, we sought to answer three essential questions: What resources facilitated the emergence of farms in the Tacámbaro-Turicato region? What socials factors allowed the rapid consolidation of farms in the region? And what were the causes that allowed the expansion of the haciendas? Exhaustive heuristics and hermeneutics of various sources was devoted to each one's response. The life process of the haciendas can be pointed out: emergence, consolidation, expansion, contraction / decline and finally, disintegration. At the same time, it is concluded that although the European is fully visible in the colonial order, the pre-Hispanic constitutes the foundations (not always visible) of the same and, to a great extent, influenced the civil or religious political-administrative structure of colonial Michoacán in which were inserted the haciendas and indigenous communities.
La región de Tacámbaro-Turicato cuenta con abundantes recursos naturales que la hicieron codiciada desde tiempos anteriores a la llegada de los europeos, quienes, al descubrir sus riquezas, no dudaron en colonizar subordinando a sus antiguos moradores. El ejemplo mejor conocido de esto lo constituye la gran cantidad de haciendas que prosperaron en ella. En muchos casos los poseedores de éstas entraban en conflicto por las tierras con las vecinas comunidades indígenas. El caso de la hacienda de San José Puruarán y sus dueños, los Peredo, constituye un caso representativo de este tipo de pleitos tanto para la región como para Michoacán y que es ampliamente conocido por los especialistas. Sin embargo, hasta la fecha la información sobre sus orígenes, consolidación y lo que esto involucró, así como de sus relaciones con las haciendas vecinas y las comunidades indígenas con las que coexistía es pobre y escasamente documentada, casi al margen de la historiografía ya que se limita en gran parte a referencias breves. Para este trabajo se buscó dar respuesta a tres preguntas esenciales: ¿Qué recursos facilitaron el surgimiento de haciendas en la región de Tacámbaro-Turicato?, ¿qué factores sociales permitieron la rápida consolidación de las haciendas en la región? Y ¿cuáles fueron las causas que permitieron la expansión de las haciendas? A la respuesta de cada una se le dedicó una exhaustiva heurística y hermenéutica de diversas fuentes. Se puede señalar el proceso de vida de las haciendas: surgimiento, consolidación, expansión, contracción/declive y finalmente, la desintegración. Al mismo tiempo se concluye que si bien, lo europeo es plenamente visible en el orden colonial lo prehispánico constituye los cimientos (no siempre visibles) del mismo y, que en gran medida influyeron en la estructura político-administrativa civil o religiosa de Michoacán colonial en la cual estaban insertadas las haciendas y las comunidades indígenas.
