The juvenile protest is one of the representations more diffused in the imaginary one social of the western countries. With the recognition of the student revolts and the countercultural manifestations that were derived after the sixty, as the movement hippie, the antinuclear protest and the revolution idea like it proclaims generacional, the youths were in the vanguard of the sociocultural most intense transformations in the XX century. Throughout the decades of sixty seventy they were the indiscutidos main characters of the social and cultural change in the countries that presented an industrial advanced development, while the labor movement passed to second term in the ideological and political interpretations of the moment. In our country, the echoes of that rebellion generacional entered the doors of the political authoritarianism and they still untied an entire series of events and events difficult to interpret and to recognize in the multiple manifestations of the spirit of time of a generation: new forms of political practice and transformations in the niche of the daily (sexual revolution, equality of goods, the rock like music generacional, the consumption of the drugs like an expansion of the mind, the utopia and the rejection of the mature world by means of new languages) life as symptoms of a necessity of living imaginative and lúdicamente presently.
La protesta juvenil es una de las representaciones más difundidas en el imaginario social de los países occidentales. Con el reconocimiento de las revueltas estudiantiles y las manifestaciones contraculturales que se derivaron después de los sesenta, como el movimiento hippie, la protesta antinuclear y la idea de revolución como proclama generacional, los jóvenes se encontraron en la vanguardia de las transformaciones socioculturales más intensas del siglo XX. A lo largo de las décadas de los sesenta y setenta fueron los indiscutidos protagonistas del cambio social y cultural en los países que presentaban una desarrollo industrial avanzado, mientras el movimiento obrero pasaba a segundo término en las interpretaciones ideológicas y políticas del momento. En nuestro país, los ecos de aquella rebelión generacional irrumpieron las puertas del autoritarismo político y desataron toda una serie de eventos y acontecimientos todavía difíciles de interpretar y reconocer en las múltiples manifestaciones del espíritu de época de una generación: nuevas formas de práctica política y transformaciones en el nicho de la vida cotidiana (revolución sexual, igualdad de géneros, el rock como música generacional, el consumo de las drogas como una expansión de la mente, la utopía y el rechazo del mundo adulto mediante nuevos lenguajes) como síntomas de una necesidad de vivir imaginativa y lúdicamente en el presente .
