In the conquest of America, gold and silver were the driving force behind the numerous expeditions that Spain and Portugal would carry out. In the case of Spain, they did not obtain enough gold in the river pleasures of the Antillean islands. Once the Spanish soldiers defeated the predominant nation of the Mesoamerican area and having obtained only a small amount of gold from the sacking of the palaces, temples, tombs and other sacred sites, the search began for the places from which they were obtained The precious metals, so it was necessary to explore in principle the pleasures that were formerly dominated by the Mexicas, thus began to exploit the pleasures of gold on the Pacific coast; However, these were quickly exhausted by the year 1540. Subjugation and colonization explorations began, followed by the search for and discovery of the first silver mines in the central region of the conquered territory in the 1530s. The first argentine mines that were reported were those of Taxco in 1532; Followed by Zumpango del Río, Zacualpan, Sultepec, Temascaltepec and Espíritu Santo, in the middle of the sixteenth century and Tlalpujahua in 1558, these mines were called La Provincia de la Plata, this first mining district was located in the northwest And southeastern of the present state of Guerrero, the south of the state of Mexico and the northwest of Michoacán. In the middle of the sixteenth century also began to explore the mineral areas of the southwestern hills of the state of Hidalgo, north of Mexico City, such as the Tlahuilipan and Arriba (Pachuca), the Royal Atotonilco and the Royal from the Mount.
En la conquista de América, el oro y la plata constituyeron el principio motor de las numerosas expediciones que realizarían España y Portugal. En el caso de España, no obtuvieron la suficiente cantidad de oro en los placeres fluviales de las islas antillanas. Una vez que los soldados españoles derrotaron a la nación predominante del área mesoamericana y habiendo obtenido apenas una pequeña cantidad de oro, provenientes del saqueo efectuado a los palacios, templos tumbas y demás lugares sagrados, se inició la búsqueda de los lugares de donde se obtenían los metales preciosos, por lo que fue necesario explorar en principio los placeres que antiguamente estaban dominados por los mexicas, así se inició la explotación de los placeres de oro en la costa del Pacífico; sin embargo, éstos se agotaron rápidamente hacia el año de 1540. Posteriormente, se inician las exploraciones de subyugación y colonización, seguida de la búsqueda y descubrimiento de las primeras minas de plata en la región central del territorio conquistado, en la década de 1530. Las primeras minas argentíferas que se reportaron fueron las de Taxco en 1532; seguidas por las de Zumpango del Río, Zacualpan, Sultepec, Temascaltepec y Espíritu Santo, a mediados del siglo XVI y Tlalpujahua en 1558, a estos reales de minas se les denominó La Provincia de la Plata, este primer distrito minero estaba localizado en el noroeste y sureste del actual estado de Guerrero, el sur del estado de México y el noroeste de Michoacán. A mediados del siglo XVI se comenzaron a explorar también las zonas minerales de las serranías del suroeste del estado de Hidalgo, al norte de la ciudad de México, como los reales de Tlahuilipan y de Arriba (Pachuca), el Real de Atotonilco y el Real del Monte.