The bridges are among the most important elements of any highway system, if not the most important, because the complete or partial interruption of traffic can be the cause of great economic to prevent or delay the transport of products losses between communities or cause production downtime in working-class people being unable to reach their workplace, as well as preventing access to vital services such as medical services provided by hospitals. Also in an emergency situation the closure of a bridge could cost human to prevent access to support groups or prevent the escape people who are in danger zone lives. Many of the existing bridges in the Mexican road network are over 30 years of age, so they were designed with design methodologies not as refined, particularly when it comes to accidental loads such as those generated by earthquakes and wind, the quality of materials was less and live loads used were lower than those currently circulating on the roads. Due to these reasons the demand for maintenance, rehabilitation and replacement of bridges is constantly growing, while financial resources are more limited each day as a result of the economic crisis facing our country.
Los puentes se encuentran dentro de los elementos más importantes de cualquier sistema carretero, si no es que es el más importante, debido a que la total o parcial interrupción de tráfico puede ser la causante de grandes pérdidas económicas al evitar o retrasar el transporte de productos entre comunidades o al provocar la inactividad productiva en personas de la clase trabajadora por no poder llegar a su lugar de trabajo, además de evitar el acceso a servicios vitales tales como los servicios médicos que ofrecen los hospitales. También en alguna situación de emergencia el cierre de un puente podría costar vidas humanas al impedir el acceso a grupos de ayuda o evitar la salida a personas que se encuentran en zona de peligro. Muchos de los de los puentes existentes en la red carretera mexicana tienen más de 30 años de edad, por lo que fueron diseñados con metodologías de diseño no tan refinadas, particularmente en lo que refiere a cargas accidentales como las generadas por sismos y el viento, la calidad de los materiales era menor y las cargas vivas utilizadas eran inferiores a las que actualmente circulan en las carreteras. Debido a estas causas la demanda de mantenimiento, rehabilitación y sustitución de puentes está en constante crecimiento, mientras que los recursos financieros se ven cada día más limitados como consecuencia de la crisis económica que enfrenta nuestro país. Por esta razón es indispensable que se inviertan los recursos existentes de la manera más adecuada para mantener los puentes en buen estado, al menor costo y con el mayor tiempo de vida posible.