Roads, highways before, you can not say that someone has invented. They were in response to the impulse of man to achieve better living conditions. From walking his steps in search of the future on the horizon, it became hiking the trails; hence, the construction of roads, there was only one step. The word "way" comes from camminus celtolatino, meaning trodden land, which usually passes. Trodden earth is nothing but earth and tread end, the signal trace is left foot. Hence, a way of defining principle is: land footprint so persistently that allows transit from one place to another without much effort and without losing track. Since ancient times, the construction of roads has been one of the first signs of advanced civilization. When the cities of early civilizations began to increase in size and population density, communication with other regions became necessary to bring or transport food supplies to other consumers. Among the first road builders are the Mesopotamians, around 3500 BC; the Chinese, who built the Silk Road (the longest in the world) for 2,000 years, and developed a system of roads around the XI century BC, and the Incas of South America, who built an advanced network of roads that can not be roads be considered strictly as the Incas did not know the wheel. This network is distributed throughout the Andes and included cut into solid rock galleries.
De los caminos, antes de ser carreteras, no puede decirse que alguien los haya inventado. Surgieron como respuesta al impulso del hombre por alcanzar mejores condiciones de vida. De tanto andar sobre sus pasos en busca del futuro en el horizonte, convirtió en senderos las veredas; de ahí, a la construcción de los caminos, no había más que un paso. La palabra “camino” proviene del celtolatino camminus, y significa tierra hollada por donde se transita habitualmente. Tierra hollada no es otra cosa que tierra pisada y a final de cuentas, huella es la señal que deja el pie. De aquí, que un principio de definición de camino es: tierra pisada con tanta persistencia que permite el tránsito de un lugar a otro, sin mayores esfuerzos y sin perder el rumbo. Desde la antigüedad, la construcción de carreteras ha sido uno de los primeros signos de civilización avanzada. Cuando las ciudades de las primeras civilizaciones empezaron a aumentar de tamaño y densidad de población, la comunicación con otras regiones se tornó necesaria para hacer llegar suministros alimenticios o transportarlos a otros consumidores. Entre los primeros constructores de carreteras se encuentran los mesopotámicos, hacia el año 3500 a.C.; los chinos, que construyeron la Ruta de la Seda (la más larga del mundo) durante 2,000 años, y desarrollaron un sistema de carreteras en torno al siglo XI a.C., y los incas de Sudamérica, que construyeron una avanzada red de caminos que no pueden ser considerados estrictamente carreteras, ya que los incas no conocían la rueda. Esta red se distribuía por todos los Andes e incluía galerías cortadas en rocas sólidas.