Mexico has great potential to develop forestry in natural forests, but mainly creating new Commercial Forest Plantations, as they have done for many years, countries such as Finland, the U.S., Brazil and Chile. In 2000, 35% of the world supply of wood came as plantation and this contribution is expected to reach 50% in 2040 (Castañeda, F. 2000). It is known that the rapid development of the railway network in the early twentieth century, led to the establishment of small plantations with different species of Eucalyptus (Eucalyptus spp) designed to supply fuel to the railroad machines. However, it is up to the decade of the fifties which the news of a proposed commercial plantations, for its time, was very important, it is about 5,500 hectares planted between 1953 and 1959 by the company fibracel in Tamuín SLP Most of the forest land ownership is in the hands of the social and private property. Consequently, the afforestation effort shall be made by the sector, either through direct or indirect management. Annually about 1,500 million was imported, mainly from pulp and paper (FAO, 2000) whose raw material is wood, that globally, more and more comes from plantations created for this purpose. This means a great opportunity for the country to develop large-scale industrial tree plantations, helping to bring great investment, creating many jobs, substitute imports and generate additional environmental benefits. To this end, Mexico has around 11 million hectares which could develop highly productive and internationally competitive (SEMARNAT, 2000) plantations. Therefore, it is of great interest to strengthen knowledge about plantations by educational institutions, businesses, private technical, government, producers, and in general, all stakeholders in this activity, so you can boost the implementation of projects for new planting or processing.
México tiene un amplio potencial para desarrollar la silvicultura en sus bosques naturales, pero principalmente creando nuevas Plantaciones Forestales Comerciales, como lo han hecho hace muchos años, países como Finlandia, Estados Unidos, Brasil y Chile. En el año 2000, el 35% de la oferta mundial de madera provenía ya de plantaciones y se estima que esta contribución llegará a un 50% en el 2040 (Castañeda, F. 2000). Se sabe que el rápido desarrollo de la red ferroviaria, a principios del siglo XX, propició el establecimiento de pequeñas plantaciones con diferentes especies de Eucaliptos (Eucalyptus spp) destinadas a abastecer de combustible a las máquinas ferrocarrileras. Sin embargo, es hasta la década de los cincuentas que se tiene noticia de un proyecto de plantaciones comerciales que, para su época, fue muy importante, se trata de 5,500 hectáreas plantadas entre 1953 y 1959 por la empresa FIBRACEL, en Tamuín S.L.P. La mayor parte de la tenencia de la superficie forestal está en manos de la propiedad social y privada. En consecuencia, el gran esfuerzo de forestación deberá ser hecho por dicho sector, ya sea a través de gestión directa o indirecta. Anualmente se importan alrededor de 1,500 millones de dólares, principalmente de celulosa y papel, (FAO, 2000) cuya materia prima es la madera, que, a nivel mundial, cada vez proviene más de plantaciones creadas con este propósito. Esto significa una gran oportunidad para el país, de desarrollar a gran escala las plantaciones forestales industriales, contribuyendo a traer grandes inversiones, crear numerosos empleos, sustituir importaciones y generar beneficios ambientales adicionales. Para este propósito, México tiene alrededor de 11 millones de hectáreas en las cuales se podrían desarrollar plantaciones altamente productivas y competitivas internacionalmente (SEMARNAT, 2000).