I have intended in this thesis to really elucidate the concepts and knowledge in the drama from a philosophical perspective, of there their title, with the non-alone end of demonstrating that in the theater there is really a sense and he/she is payee of knowledge, but also of understanding the way of being of the true thing and the knowledge in the scenic phenomenon. The idea of a philosophy of the drama is born of the conception of the theater like one practical philosophy that some professionals of the dramatic art defend; concept that he/she speaks to us of the unquestionable relationship that exists among the philosophy and the scenic arts. Relationship that settles down from the position that it occupies the philosophy in the cultural system. "The philosophy has two faces: one you it directs toward the religion and the art; the other one toward the science. With the first it possesses in common the orientation toward everything of the reality; with this, the character theoretical." 1 The interest for the philosophy presently study is centered particularly in their relationship with the scenic arts and the contact of these with the religion, mainly in the old tragedy. Not we forget their ritual origin and their mythical mechanisms. In other words, I don't seek to define the drama like a philosophy, but to rely on the philosophy like mean to arrive to a conception of the sense really and the knowledge in the drama. Taking to the philosophy like half, not it discards none of the three environments in that Johan divides it Hessen: in the one scientific environment our interest is guided toward the calls sciences of the spirit and the orientation of these to the humanistic understanding; in the one field of the values occupies us the paper that you/they play the aesthetics and the ethics in the one I process interpretive of the theatrical spectator; and, in the third land, that that the one theater contributes to the task of the philosophy toward a conception of the universe.
Me he propuesto en esta tesis elucidar los conceptos de verdad y conocimiento en el drama desde una perspectiva filosófica, de ahí su título, con el fin no solo de demostrar que en el teatro hay un sentido de verdad y es portador de conocimientos, sino también de comprender el modo de ser de lo verdadero y el saber en el fenómeno escénico. La idea de una filosofía del drama nace de la concepción del teatro como una filosofía práctica que defienden algunos profesionales del arte dramático; concepto que nos habla de la relación incuestionable que existe entre la filosofía y las artes escénicas. Relación que se establece desde la posición que ocupa la filosofía en el sistema cultural. “La filosofía tiene dos rostros: uno se dirige hacia la religión y el arte; el otro hacia la ciencia. Con los primeros posee en común la orientación hacia el todo de la realidad; con ésta, el carácter teórico.” 1 El interés por la filosofía en el presente estudio se centra particularmente en su relación con las artes escénicas y el contacto de éstas con la religión, sobre todo en la tragedia antigua. No olvidamos su origen ritual y sus mecanismos míticos. En otras palabras, no pretendo definir el drama como una filosofía, sino apoyarme en la filosofía como medio para llegar a una concepción del sentido de verdad y el conocimiento en el drama. El tomar a la filosofía como medio, no descarta ninguno de los tres ámbitos en que la divide Johan Hessen: en el ámbito científico nuestro interés está encaminado hacia las llamadas ciencias del espíritu y la orientación de estas a la comprensión humanística; en el campo de los valores nos ocupa el papel que juegan la estética y la ética en el proceso interpretativo del espectador teatral; y, en el tercer terreno, lo que el teatro aporta a la tarea de la filosofía hacia una concepción del universo.